top of page

¿Alguna vez superas la pérdida

  • Evelin Folgar
  • 2 oct 2018
  • 1 Min. de lectura

Cuando perdemos un ser querido definitivamente es un momento triste, en la cual buscamos fortaleza para seguir adelante sin esa persona. ¿Pero qué pasa cuándo esa persona es tu hijo u hija? La situación cambia, ¿no?


Es una excelente pregunta, han pasado cuatro años desde que mi angelito partió y siento como si hubiera sido ayer.

Muchas personas se acercaron a nosotros, nos dieron palabras de aliento. Muchos con buena intención, pero en ese momento, nada puede llenar el vacío que deja un hijo.

Ahora que veo hacia atrás, es como si hubiera aprendido a vivir con ese dolor. He aprendido a manejar mi vida. Claro está que me metí de lleno en mi trabajo, eso me ayudó bastante. Pero cada vez que miraba una mamá con su bebé en brazos, la nostalgia y tristeza se apoderaban de mí. Soy de las personas que no le gusta mostrar cuando me siento mal. Por lo general, ando con una sonrisa y tiendo a molestar un poco (solo un poco). Así que, ese sentimiento de tristeza se convertía en frustración. Me recuerdo cuando falleció mi papá, no lloré, me decía debo ser fuerte por mi mamá y mi hermana. Después terminé con una crisis nerviosa, con tan solo 15 años. Así que sabía que necesitaba sacar ese sentimiento. Algunas veces lloraba con Jorge y otras lloraba hasta quedarme dormida.

Seguramente, esas lágrimas me ayudaron a sobrellevar el momento. Ahora que retrocedo en el tiempo, me doy cuenta, que en realidad no se trata de superar una pérdida, se trata de aprender a vivir con una herida. Conforme pasa el tiempo, aprendes que todo tiene un sentido.

Entradas recientes

Ver todo
Mi historia, mi ángel

Mi primer embarazo transcurría normal. Todavía recuerdo la emoción que sentí al saber que un pequeño ser crecía dentro de mí....

 
 
 

Comments


Follow

  • Facebook
  • Twitter
  • Pinterest
  • LinkedIn
  • Instagram

©2018 by Érase una vez un Arcoíris. Proudly created with Wix.com

bottom of page